miércoles, octubre 31, 2007

Antes y después

(Foto: Namasté)
Antes y después.
Reflexioné sobre tiempo al pasar por delante de un escaparate donde ofertaban una televisión: “antes 999 €, ahora 750 €”. Lo gracioso es el cartel lleva varios meses puesto, lo que me hace preguntar cual es la franja temporal que delimita lo que fue “antes” de lo que es “ahora”. Y pienso frases: -“Antes me querías”, -“antes no hacías estas cosas”, -“antes estaba perdido”, -“antes no tenía trabajo”, -“antes estaba peor”, -“antes no me hubieses dicho esto”… ¿Y hoy? El “hoy” se convertirá irremediablemente en el “antes” dentro de un tiempo. ¿Qué vas a conservar de este hoy?¿Qué cosas no ofertarías a ningún precio?.

jueves, octubre 25, 2007

Busqueda

(Foto: Namasté)

También soy de la opinión de que todos buscamos algo, continuamente...
A veces es una conexión con lo sagrado, otras son nuevas situaciones, evolucionar personalmente, un nuevo amor, abrir nuevos caminos, ascender “otras montañas”, un futuro mejor…
Nuestras vidas son los rios que van a dar al mar…

En el Ganges todo es búsqueda y encuentro.

jueves, octubre 18, 2007

Saris para el corazón

(Foto: Namasté)
Varanasi (Benarés). Ocho de la mañana. A esa hora comienzo yo mi trabajo en este lado del mundo. Muchas mujeres ya se han dado su baño sagrado en el Ganges y secan sus saris al sol sosteniéndolos entre las manos. El calor y la fragilidad de las prendas hacen que se sequen rápidamente. Mientras tanto, yo doy un botonazo y el ordenador comienza a funcionar. Mi pantalla monocolor y la imagen rutinaria me hace recordar aquellos momentos, instantes multicolores llenos de escenas novedosas.
Quizás deba continuar buscando aquí también, intentar descubrir momentos nuevos en esta línea constante en la que se convierte muchas veces la vida, nuevos saris que alimenten mi corazón.

lunes, octubre 15, 2007

De lo terrenal

(Foto: Namasté)
Antes de subir al templo, la gente solía comprar coloridas flores para poder ofrecérselas al dios adorado. También acompañaban alimentos u objetos personales. La cuestión es poder ofrecer una pequeña parte de nosotros a esa deidad suprema, pidiéndole que nos acoja o ampare en todo lo que hacemos, que nos proteja de todo mal, porque… al fin y al cabo, no somos nada más que mortales, una mota de polvo en medio del universo.

miércoles, octubre 10, 2007

Regresando de la India

(Foto: Namasté)
Vuelvo a mi lugar en el mundo después de un magnífico viaje.
Las imágenes golpearon mis retinas a fuerza de pasear las ciudades, de kilómetros en coche, de girar muchas esquinas, de buscar nuevos lugares.
¡Grandioso es el patrimonio monumental de la India!. Sin embargo, no encontré Taj Mahal más majestuoso que la simpatía de aquellas gentes, las sonrisas de aquellos niños y las miradas de aquellos ojos, que parecían mirar como buscando algo más.
El color lo ponían las mujeres y sus saris. Ellas son las mariposas que revolotean a lo largo y ancho del país, pinceladas de alegría a todos los paisajes que se me ofrecieron.
Estos son mis mejores recuerdos, los que quedarán más grabados en mi memoria.