Los dioses que me rodean
Yo me aferro a los dioses.Yo me aferro a los dioses pero no a esos que habitan los cielos, no.
Hoy me aferro a los dioses que moran aquí abajo, los que encuentro en las esquinas y aquellos otros que me acompañan.
Al dios de la amistad, al que me otorga tus ojos, al dios infantil, el dios de las flores o el que baila el viento contra mi cara.
Al que pone música a las olas y al que reposa los rayos en mis manos, al que me da la paz, me sosiega o me levanta.
Hoy me aferro a los dioses, ¿Cuántos tienes frente a tu mirada?
posted by Miguel Angel Peláez at 12:09 p. m.
8 Comments:
Se te olvido uno... Y el mas importante, EL AMOR.
Vine a agradecerte tu visita...
Y aqui me encuentro contigo empezando un nuevo proyecto.
En verano...
Yo aqui en pleno otoño, el invierno se viene ya y no quiero!
El frio no me gusta nada nada...
Volveré por aquí...
Saludos
Muchos dioses, distintas creencias, lo importante es que con todos ellos nos muevan verdaderos sentimientos. No importa cuantos tengamos en frente, si no saber que están ahí...Hermoso post.
Muack!
Que bello post. parte de nuestra meta de la vida es encontrar a Dios en los demas, al Cristo Peregrino en cada migrante, el amor y la solidaridad siempre deben guiarnos.
saludos desde tijuana.
te leo.
Yo me aferro a los que quiero conocer, al que viene en camino para chocar con mi destino.
Te abrazo
Yo me aferro al Dios del amor, pero el amor que me puede entregar en estos momentos mi único motor de vida....Mi Hija.
También el Amor que me entrega Dios celestial que de laguna manera mueve mi existir de una manera silenciosa, pero presente, a pesar de que a veces me aleje de él.
Me mueve ser alguien mejor en la vida.
Gracias por visitar mi blogg.
Cariños Claudisima
Enhorabuena por el post... me ha parecido simplemente PERFECTO!!!
Cuando llegue a casa te pongo un link para seguirte de cerca... Un abrazo
Qué bello post. Me inspiraste
un beso
Mis dioses, a los cuales venero y que son, por cierto, mis creencias sublimes, los abandono a medida que voy creciendo.
Más madurez, menos dioses.
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